Tras una semana bastante desmotivada de entrenos, el sábado volvimos a quedar los 5 apocalipticos (Sergio, Ramón, Manu, Jose Luis y yo) para una nueva sesión de Sierra, eso sí, esta vel más calmada.
A las 7:15 Ramón me recogió en la estación de trenes del Puerto y nos dirigimos hacia Jerez para buscar a Manu y Jose Luis. Sergio se fue por su cuenta y ya coincidimos con él en la venta antes del cruce de Zahara.
Desayuno completito y a tirar para el pantano. Jose Luis y Sergio nadaron algo mientras Manu, Ramón y yo hicimos unos km de calentamiento. Luego nos juntamos todos y empezamos a subir el Puerto de las Palomas muy tranquilos para coronar juntos a excepción de Sergio y Jose Luis que iban un poco más retrasados. Paramos en Grazalema a repostar agua y continuamos de nuevo dirección a Villaluenga, donde soltaban un toro. Cruce de Ubrique y de nuevo para el Bosque para parar en un supermercado a beber coca-cola y agua antes de empezar el plato fuerte del día, el Puerto del Boyar. El calor ya apretaba y decidimos subir tranquilos hasta la altura del torreón, donde Manu, Ramón y yo apretamos un poco. Sergio y Jose Luis se quedaron más atrás. Manu impuso su ritmo y poco a poco se fue en solitario, detrás yo le seguía no muy distanciado y Ramón se quedó un poco hasta que me enganchó y coronamos juntos exigiéndonos un poco más. Luego bajada dirección a las Palomitas donde Ramón y yo coronamos juntos y bajada de las Palomas, donde Sergio nos dió caza para ir dirección al pantano y soltar las bicis. Manu ya estaba esperando en la fuente de zahara para rellenar los bidones y prepararnos para correr.
En total 100km en 4 horas y 11 minutos, sin mucho forzar y apretando un poco en el puerto del Boyar.
Luego Sergio se tuvo que ir y Manu, Jose Luis, Ramón y yo nos pusimos a correr por los alrededores del pantano. Una ida y vuelta de 15 minutos con mucho calor donde Manu se encontró como un tiro y fue marcando un fuerte ritmo desde el inicio. Ramón se descolgó un poco detrás mío y de Jose Luis, pero ya en el giro siguiño a buen ritmo sin que Jose Luis y yo pudieramos cogerlo de nuevo. Manu nos pasó muy rápido y continuó para rondar la hora a pie. Nosotros 3 hicimos 30 minutos.
Luego baño en el pantano, recuperarnos un poquito y vuelta para casa. Por la noche tuvimos una grata velada en casa de Jose Luis, una barbacoa por todo lo alto donde compartimos buenas anecdotas y locuras de todos los años que llevamos machacándonos. Para terminar un postre de lujo que hizo mi niña (Mamen), y que por supuesto voló rápidamente.
Esta semana, espero poder centrarme de nuevo en los entrenos ya que será la última antes de partir para Holanda, el pronóstico no es muy halagueño, 44km/h de viento y lluvia. Pero recuerdo que somos Ironman y estamos aquí para sufrir.....Trisaludos.
0 comentarios:
Publicar un comentario