En 2 semanas estaremos concentrados en este precioso enclave en la sierra nevada de Granada donde respiraremos durante 4 días triatlón por los cuatro costados. Los entrenos serán duros y el hecho de estar en altura hará que nuestro organismo sufra de lo lindo.

Es por ello que llevo varias semanas de carga y mis cuadriceps empiezan a pedir clemencia. El lunes lo tomé de descanso total. Ayer Martes cayeron 91 km en mi nueva compañera verde (cada vez estoy más a gusto sobre ella) en 3 horas con muy malas sensaciones y piernas cargadas, pero por la tarde pude sumar 40 minutos de carrera continua con varios cambios de ritmo. El pie me respetó y Mamen me acompañó en sus nuevos patines en línea. Dentro de poco espero que me marque el ritmo a seguir.

Hoy Miércoles el día ha amanecido con un temporal de 3 pares de levante. Aun así he salido de nuevo en la cabrita con intención de pegarme un buen calentón en las patas a base de series. Y así ha sido los primeros 40 km los he invertido en hacer una serie acoplado con todo el desarrollo metido en dirección a Chipiona. Como podeis ver en las fotos arriba he marcado 1 hora 04 minutos en 40 km y una media de 37 km/h. En algunos tramos he rodado por encima de 54 km/h, bestial pero más horrorosa ha sido la vuelta con tramos en contra de la furia del viento a 17 km/h. Al final 62 km más para las patas. Ya por la tarde Mamen y yo hemos ido al gimnasio para hacer 1 hora de spinning y acto seguido me he tirado al agua para nadar 3200m notando cada vez mejor agarre y sensaciones de deslizamiento.

Mañana espero de nuevo rodar un poquito en bici y a pie y si el tiempo está malo, tocará de nuevo piscina. Trisaludos